El baño es un espacio donde el cuerpo y la mente se purifican, se relajan y se renuevan. Es un lugar íntimo donde nos conectamos con nosotros mismos y donde podemos reflexionar sobre la importancia del cuidado personal y la higiene. En este espacio, podemos encontrar la tranquilidad y la serenidad necesarias para enfrentar los desafíos del día a día.